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Les O?rres, 9. (De nuestro
enviado especial:)
Tengo la impresión de que elFour?» está listo para sentencia
?as la estocada que ha pegado
caña entre Meribel y Les Orr.es.
tas de nueve minutos de diferen
a sobre Fuente?? inés ?de diéz?o b r e Thevenet significan -una
roeza que ni el Merckx de los trié
res tiempos superó jamás, en só
ocho etapas, y con París todavía
trece jornadas de distancia.
Posiblemente el-mejor elogio queuede hacerse hoy de Luis Ocaña
decir que ha triunfadb ?del ?mo-o y manera que lo hacé M?éickx;?
.n que cori ?elló pretendamos ésta
lecer ninguita comparacióñ,;? El;
monstruo» ya ?lo tiene tddo ,,K el,,onquense está empezando á? ?ádor
ar su historial. Pero durante., va
ias horas, nuestro pensamiento -
.ivo que -saltar de la carÑtera delTeur» has? 1, hogar de .:Merckx.
aro establecer la imagen más di
ecta. posible efltre ,. aqbos; El Conuense ha exhibido la misma po
«ncia. la ;misma decisión y la mis
a voluntad que puso el «monsmo» en la etapa del. «Tours 1969
ue terminaba en - Mourenx? Ville
Touvelle, después dé? escalar Asin, Peyresourde,
- Tourmalét i Au
?isque en solitario.
En este aspecto, Ocaña ha teni-
.0 la suerte de contar con Fuentesu lado. aünque sólo -fuese para
elearse, para distraerse ?en algo.ientras pasaban los kilómetros.
eportjvarnente el asturiano ha si
o tan negativo para el ronquen-
De todas maneras, para qáe pierda este «Tour» presiento que el
cielo tendrá que tragarse a la tie
rra, u ocurrir un verdadero cata
clismo,
La gesta de Ocaña y Fueñte tiene todavía mayor alcance si se exa
mina, la clasificación general. El
de Priego se afirma en el puestode líder, mientras que? el asturia
no pasa del duodécimo puesto ?en
el ?que se había colocado en la etapa del dia anterior, desde el 33
que tenía antes ?de empezar las eta
pas, alpinas? nada ?menos que al -segundo.
,. ?
Qcaña y Fuente; Fuente y Ocaña.
En ese emocionantg duelo -entre
dos extraordinarios çiclistas españoles se va a centrar probablenien
te en la práctica. como más de. un
observador lo h ab í a pronosticado
antes de comenzar el «Tours, -la lucha: por
- el primer puesto? final.
Ciertamente, es todavía bastante
,consider.able la?; diferencia á favo
de: Ocafra, que, ?lleva a Fuente? n?lás -de nueve minutos; peéo.
debe
- ?ol-vidar?sé?que tédavía queda muchamontaña por delante y el atturiano
-
?és ?fúndéiñentalinente un éscaladorneto mientras que Ocaña aunque
también? ?sube iien disaró ya simpririéos ?ataques en el llano ---que
?fijé ?donde?sacó ?a Fuente la máyor
- part?e de la ventaja uç, ahor,g le ..i;?,
lleva? y aquel esfuérzb qúizá?lepese en las etapas montañosas?eque?;
aún quedan, ?? :.. ??:?. ,?:
Para terminar esté crónica,? diré. -
- qué, no estaría de más que ?los or-. -
ganizádores cuidasen más los deta
lles de los finales de etapas y evitasen él bochorno de las llegadas
de Meribel y Les Orres, en dondeuno está más cerca de ser un agri
mensor que un periodista. Y cons
te que sabemos conformarnos conmuy poco,
r.
-,: .P,»r?
-
t s7
f,,. -?.?
La grañ
estocáda
-dé? Ocaflá
:1;1]
En la etapa reina
de los Alpes
se puso el «Tour»_
en el bokmo
Fuente, único rival
que cuenta para
e conquense;0]
1
Un «Tour» a io? española, dijimos al comienzo
de la edición de la Vuelta a Francia 1973. Y?
los hechos confirman? el pronóstico. Entre Me
ribel y Les Orres, el lunes, en la qron etapa al
pina, Ocaña y Fuente sentencia,?on a todos sus
demás adversarios. (Foto Cifra.)
se como si hubiese ido solo, por- que pueden depositar en Thevenet,que no aceptó ni un solo relevo, Poulidor, Van Impe, Zoetemelk,
pero le quedaba el recurso de po- Van Springel y todo el lote de los
der echar la culpa a alguien de lo que partieron favoritos de Laque sucedía. Así es que estoy segu- Haya.
-
ro de que en la fase final, cuando Claro que la realidad nos asombra
Ocaña ?tuvo que centrar su pensa- incluso a nosotros, pero la ley demiento en pedalear y llegar a la la? carretera ha dictado su senten
méta, lo echó mucho en ?falta,? a cim condénando al papel de com
pesár de que con- ello robustecía parras a? unos y elevando hasta lasu victoria.
, - cima ?dé la gloria a otros. Que talvez no son los que más con?enían
Lá verdad de esta ?a?ien?tura qúe al «Tours o, mejor dicho, a sus or
entrárá en letras dd oro: en ?las pá- ganizadores.,ginas del «Tour,>, es
que a partir - . Tengo la cabeza llena ?de recuer
del ,mómento en que quedaron so?-, dos ?de algo sirve la experienlos Fuente y Ocañé,.ban tenido que ??cia? y esta, mañana me ha veni
recorrer la friolera de ciento se-,. do a la. menioria? la gran etapa de
SontO:. kilómetros, .véinte de -los Ocaña en. -la?sDauphine Liberé>)? que
cuales ?desde Embrun -hasta Les con escasas variáciones transcurrió-,
Orres? en solitario, los dos, ?en- por estas mismas «carreteras, eta-?frascados en un manoa:?. ?mano. .;de pa en la que Poulidor, Guimard y
gran casta ?deportiva?.? ¡?La-? verdad - otros nombl?es de. - cierta categoría
más? alecciónadora ?de--la?etápa ?de perdieron? :nás de? veinticinco mi-
hoy es que los? ?dós ?ñorñbi?es? ritas nutos y no: ?querían creerlo.
fuértes?del ?eTour» ?sdn esp?añolé$?y -que cuando llevadós?de sus reijci- Se? engañaban ellos, mismos atti
llas persónales se éñi?édlin-? ri im- buvéndolo ?a -una ?táctica de-reserva
vas bátállas, los? deág? no??podrén para el ?eTour». Eh cambio?yo dijeni sér ?espectadoreé?dé? este mara- en aquella- ocásión que no había
villoso duelo,? porque ?transitaráé visto más que ceniza y los hechos
con varios minutos de diferencia, me han dado la razón. Incluso estoy
Aquí es donde le duele al «Tours por decir que si Ocaña hubiese
y a sus sabios. La absoluta con- puesto a prueba sus,.fuerzas,, The.,vicción de que uno de, 1ós .dp,tie-
- venet no habría podidd resistirle enJie iré ?ganar el -eTduri? ?liri
- que .? el? Galibié?ni el Mont Veñtux.. Fe- -
nadie puedá oponer ninguna i-éi-? ?ró a veces Ocaña. peca de pusilá
tencia.,. . , ? ? , , mme y debido a ello aún no sabélá medida ?exacta de sus posibili
dades, . -Lo que ha sucedido hoy es au
ténticamente formidable para noso
tros, pero el episodio tiene otravertiente menos graciosa para los
franceses, porque hoy han vistoclaramente las pocas esperanzas
Juan PLANS BOSCH