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Pág. 6 EL MUNDO DEPORTIVO. Viernes,23dediciembrede1983
-.?
_ LOACEPTOCON DEPORTIVIDAD
La Haya, 22. (EFE.) ? La prensaholandesa y el seleccionador nacio
nal de la «maranja meóánica» han
rendido hoy un deportivo homenaje
de admiración por «la lección dé.
fútbol» que dio España frente a
Malta. -
Ningún reproche, ni la másmínima duda sobre la «limpieza»
del resultado (12-1), que permitió
la «milagrosa clasificación» de la
selección española a la fase final
del Campeonato de Europa deNaciones.
Pero todos los diarios holande
ses, que destacan en sus primeras
páginas la «proeza inesperada del
fútbQl español», lamentan que la
joven selección holandesa se hayavisto forzada a decir «adiós a
París».
El diario «Algemeen Dagbland», de Rotterdam. con este
mismo título, «adiós a París»,
comenta que el resqltado de 12-1permitió que los éspañoles le arre
batasen a Holanda el primer lugar
de la clasificación del grupo siete, yles dio «un triunfal visado hacia
París».El diario Volkskrant, de Amster
dam, titula que «España venció aHolanda aplastando a los maite
ses», y admite que el equipo español «cumplió a la perfección la
misión que tenía encomendada,,.
«No es de extrañar el resultadode 12-1 en Sevilla, lo que sorpren
dió mucho más fue el 5-O de Rot
terdam,,, señala el rotativo, alu
diendo a la precaria diferencia quela selección ((naranja>) arrancó de
Malta en el encuentro disputado en
Rotterdam la semana pasada.
España supo muy bien qué
hacer con Malta», titula «Trouw».
de Rotterdam, lamentando que
«ocurrió lo que era inimaginable».
((Gracias a esta diferenciamonstruo de goles, el equipo
español eliminó a Holanda, y ellono tiene nada que ver con sobor
nos ni componendas. Los espa
ñoles jugaron con Malta al gato yal ratón, como debían hacer, y el
resultado justifica su buen cál
culo,>, agrega.
El mismo diario supone que laeliminación de Holanda tendrá «re
percusiones> en el futuro deportivode Kees Rijvers, seleccionador
nacional holandés, acusándole dehaber sacado
((POCO provecho>, al
partido jugado en Roterdam.El «Telegraaf,>, de Amsterdam,
resume . seis columnas el espíritu
de los comentarios holandeses:
((España rompe el sueño de los
naranjas», señalando que el«dramático acontecimiento» -de
Sevilla privá a los holandeses deacudir a París.
En un editorial?, el rotativo, precisaque «no hay nada que objetar al
triunfo español ni a la calificación
hispana. Lo único que se puededecir es que Rijvers ha recibido
una buena lección de MiguelMuñoz,,.
«Los españoles jugaron en
campeón, y cuando se juega así
hay que reconocerlo», ha dichohoy el seleccionador nacional
holandés, Kees Rijvers, al comen
tar la ((increíble,, victoria españolafrente a Malta.
Rijvers, aunque dijo estar desilu
sionado, por perder «el tren de
París», declaró que ((le gustó laselección española de fútbol» en
el encuentro de Sevilla.((Los españoles jugaron muy
bien, con arrojo, dándolo todo,pero también çon sangre fría y
cálculo, y obtuvieron lo que buscaban», agregó.
Saliendo al paso de algunos
comentarios de la prensa holande
sa, que hoy piden su dimisión por nohaber ((arrancado» más goles a
Malta en Rotterdam, Rijvers indicó
que España ((podía incluso haber
marcado más goles, con sólo pro
ponérselo».
((En la práctica, de pocohubieran servido dos o tres goles
más de diferencia, porque laselección española en Sevilla
pudo haber obtenido cualquier
resultado que necesitara».
El seleccionador lamentó que ((el
joven equipo holandés no pueda
tener ahora la ocasión de adquirir
en París más experiencia».
Antes del encuentro de Sevilla,Rijvers daba a España ((un.dos por
ciento,, de posibilidades para su
clasificación. Al término de la primera mitad del partido, con resulta
do de 3-1, Rijvers seguía dándole a
España ese ((dos por ciento».
ePero los españoles salieron en
tromba en la segunda mitad,
bombardeando a cada minuto almeta de Malta, y se produjo el
milagro>,. - admitió Rijvers. ((con
dolor pero con entereza, porquelos milagros son posibles en fút
bol».
Su prensa habla de ?lección española...sin sobornos?
qveis (seleccionador): ?Jugaron tan bien que pudieron marcar más goles?
A Rijvers le llueven las
críticas porque su selec
ción no «supergoleó»
como la de M.M.
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LA BOTELLA
Y Bonello persiguió al turco Góksen con ?una botella de cerveza en
la mano. Más que una queja, fue un gesto, una intención y hasta quizá
una maniobra. Quiso predisponer al árbitro pero fue inútil. Se dio cuen
ta más tarde, cuando ya sus rodillas se habían hundido dos veces en elreblandecido terreno del Benito Villamarin. Desesperación, amargura,
tristeza y la imagen patética de un hombre, de un deportista, que
intentó cambiar el curso de una derrota histórica tan sólo con un «cas
co>) de cerveza en sus manos. Unas manos que se quedaron vacías y uncorazón que se llenó de goles españoles. de jinos goles que levantaron
a un país, a todo un país sumido en el drama cotidiano. A todo un pue
blo que, por una vez, gritóunido la palabra gol por doce veces ennoventa minutos. Y eso lo consiguió la selección.
Atrñs queda el recuerdo emocionado de «Alcalá-20» y el terrorífi
co acz-il.mle de Barajas. Atrás quedan también las discrepancias, las
crispcns y los fracasos. España vibró el miércoles noche y lo hizosin sobnsalto y con la alegría de un ((gordo» anticipado.
Aqutrán ya no importa y el Eire - Holanda, tampoco. Ahora está
fresco arito de 38 millones de españoles que por doce veces gritaron
gol. A holanda se le ha desvanecido el sueño casi real del Parque de
los Príncipes, porque París sólo se pudo ver el miércoles noche desdelo alto de la Giralda. Y Bonello no se acuerda ya de la
botella de cerveza, pero se acordará toda su vida de esos doce goles y
del olor de la fresca hierba del Betis. Toda España estuvo en París el
miérco?;? noche. ¡Gracias, chavales!
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