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La carrera
propiamente
dicha
comenzará el
día 6 con la
primera llegada
a un gran col,
Cerler
El pelotón profesional
empieza a rodar ? Mañana
en La Coruña comenzará la
48 edición de la Vuelta
Ciclista a España. Tres
semanas de lucha deportiva
para saber quién será el
vencedor en Santiago de
Compostela, después de
veintiuna etapas y de 3.465
kms. Diecisiete equipos y
170 corredores dirimirán sus
diferencias deportivas por
un suelo español que, una
vez más, no incluirá
Barcelona y solamente
pisará Catalunya en Lleida.
Pero la expectación será tal
que, así que el primer ciclista
comience a disputar el
prólogo, probablemente
nadie recordará que
lndurain está ausente.
Tres etapas
de montaña
casi juntas:
Valdezcaray,
Alto CamPoo
y Lagos de Enol
serán la baza de
los escaladores
VIENE DE LA PÁGINA 2
con un prólogo cránometrado individual, seguirá con una se
rie de peligrosas etapas cuajadas de toboganes en Galicia y
concluirá con la cronoescalada de Navacerrada. Seis etapas
mucho menos anodinas de lo que parece, destinadas a pro
vocar una primera selección en la que, sin duda, faltará ya al
guno de los ?apellidos ilustres?.
La segunda semana tiene etapas manchegas cuyo
principal aliciente es el viento de costado y la consecuente
aparición de abanicos. Y tiene también, en Cerler, el 6 de
mayo, la primera llegada en cuesta. Aquí será donde comen
zará de verdad la Vuelta. Porque inmediatamente después
hay los 40 kms. cronometrados de Zaragoza y las llegadas en
cuesta de Valdezcaray, Alto de Campoo y sobre todo Lagos
de Covadonga, colocadas casi consecutivamente. Es decir,
la parte más exigente de una Vuelta a España que en los míti
cos lagos tendrá ya un vencedor final o, como mucho, limita
rá las especulaciones entre dos o tres hombres.
Tres etapas de montaña prácticamente juntas serán la
gran baza que deberán jugar los escaladores para distanciar
a los contrarrelojistas. Estás pretenderán perder el mínimo
tiempo posible para rematar en la etapa contra el cronóme
tro de Santiago de Compostela, después de que la crrera
afronte su recta final con tres jornadas puramente norteñas.
Será la opción de los velocistas antes de que, como suele su
ceder, las agujas del reloj señalen el nombre del corredor que
se haya ganado el derecho a entrar en la historia.
Do
25ABR
1993